La energía azul es una forma alternativa de obtener energía eléctrica a partir del agua. Por ahora existe una planta prototipo en Noruega, pero según los especialistas, el potencial a nivel mundial es enorme.
Esta planta utiliza la energía liberada cuando el agua dulce encuentra agua salada, por ejemplo en la desembocadura de los ríos al mar. Esta energía puede ser capturada mediante una planta de energía azul, basada en ósmosis.
Para obtener este tipo de energía se necesita agua dulce y agua salada. Como residuo se obtiene agua salobre y agua dulce.
La idea es sencilla. Si se separa el agua dulce y el agua salada por medio de una membrana semipermeable (que deja pasar el agua pero no la sal contenida en el agua), el agua dulce pasará para el lado de la salada por el proceso de ósmosis. Entonces, la presión en el recipiente de agua salada aumenta respecto al del agua dulce. Esta presión, teóricamente muy alta, puede utilizarse para mover una turbina y generar electricidad de la misma forma que se hace en un embalse.
En el siguiente documental se explica el principio de funcionamiento y el alcance de esta tecnología, los subtítulos están en idioma inglés, sólo para quién no entienda noruego…
Esta energía puede obtenerse en instalaciones ubicadas en la desembocadura de grandes ríos y debido a que no se utiliza gran cantidad de agua, el impacto ambiental es reducido. Se aprovecha el agua que de una u otra forma corre hacia el mar, sin utilizar diques ni embalses. No se consume agua ni dulce ni salada. Toda el agua vuelve al medio.
Como siempre para este tipo de nuevas tecnologías, es importante aclarar que no se solucionará el problema energético mundial sólo con la energía osmótica. A diferencia de lo que se acostumbra hoy en día, donde la matriz proviene en su gran mayoría de dos o tres fuentes principales, en el futuro habrá que diversificar las fuentes. Cada región del planeta obtendrá su energía de la mejor forma, según el caso. Múltiples beneficios.
En las fuentes citadas pueden verse mas videos y fotografias de la planta ya instalada en Noruega.
FUENTES: Osmotic Power Inc., Statkraft, New Scientist.